miércoles, 18 de abril de 2012


El populismo

El populismo (del latín populus "pueblo") es un término político usado para designar corrientes heterogéneas pero caracterizadas por su aversión discursiva o real a las élites económicas e intelectuales, su rechazo de los partidos tradicionales (institucionales e ideológicas), su denuncia de la corrupción política por parte de las clases privilegiadas y su constante apelación al "pueblo" como fuente del poder. Los personajes populistas se caracterizan porque afirman enfocarse en el pueblo y velar por este.
La aparición del populismo como fenómeno social se liga a procesos de rápida modernización o cambio como una postura crítica ante los distintos grados de desarrollo que estos procesos pueden generar en las diversas clases o regiones de un país y en consecuencia una desigualdad en varios ámbitos de la sociedad. El término populismo se ha usado en política con dos acepciones diferentes; una de ellas tiene un significado positivo, pero principalmente se usa aquella con una connotación peyorativa.
En algunos casos se identifica erróneamente el populismo con la demagogia: mientras ésta última está referida al discurso del político buscando influir en las emociones de los votantes, el populismo está referido a las medidas que toma un político, buscando la aceptación de los votantes.
DE PSICOLOGÍA POLÍTICA ACTUAL:
En el contexto político, todo europeo piensa democráticamente, pero con una democracia sin duda  "a la europea" y difícil le resulta concebir que en el resto del mundo pasa otra cosa, porque precisamente la política es distinta. En efecto, la política -como el comportamiento social- no es igual en todas partes y se hace por partidos o líderes que convencen de diferentes maneras que, por efectividad, pasan o llegan al final  al POPULISMO.
Con esto, el europeo ve mucho populismo por todas partes -en un reproche político- o en todo el mundo;  pero ¿qué líder asiático triunfa -a un modo democrático- sin ser algo o bastante populista?, o ¿qué líder africano?, o ¿qué líder iberoamericano? Mientras la política europea está centrada en programas que compiten para ser elegidos -que raras veces se cumplen-, el populismo -si no cae en excesos- busca otra manera más participativa de gobernar.

domingo, 15 de abril de 2012

Hablar de las condiciones de la mujer en el mundo -de esa verdad-, es considerar insoslayablemente a la mayoría de las mujeres  en miseria y en opresión que existe en el mundo. Así es, que se concentra en la India,  en China, en la mayor parte de la población islámica, en Centroamérica, en África, etc.
Sabiendo eso, la prostitución con todas sus consecuencias de denigración y esclavitud, la padece la mujer y no el hombre, como ya algo denunciable que no se puede aceptar ni proteger con retóricas o justificaciones de grupos reaccionarios.
Pero, en irresponsabilidad y cinismo, cuando la prostitución se lleva como información a un medio de comunicación occidental, no invitan a las millones de mujeres víctimas de la "trata de blancas" o de opresiones o de reglas fundamentalistas o de miserias, no, ni a las miles de niñas que son prostituidas sin derechos humanos, sino invitan a los apologistas -o charlatanes- de ella, a esos que bien  la consienten con sus inhumanas justificaciones y, asimismo, a las prostitutas de lujo de sus lujosas situaciones o paises -las cuales la ven muy bien por su grata rentabilidad-.

viernes, 6 de abril de 2012

LA INFELICIDAD EN EL MUNDO ESTÁ MÁS CAUSADA POR HOMBRES:
Sí, el hombre determina siempre -en general- guerras, inseguridad y dominación -social-; debido, en total probación, a una trascendida cultura social que siempre ha beneficiado -en todos los hechos hasta ahora, en costumbres y leyes- al hombre, a la decisión del hombre por encima de la de la mujer.

jueves, 5 de abril de 2012

Relación de fascinación y repulsión:
A comienzos de los años treinta, Paul Nizan deploraba una universidad conservadora, llena de «perros guardianes». En la efervescencia radical de los años sesenta y setenta, ciencias humanas, crítica social y revolución parecían caminar con el mismo paso (7). El acercamiento entre estas disciplinas ilumina una institución atravesada de tensiones, respaldada por un régimen al cual le proporciona sus pilares, pero al mismo tiempo susceptible de destilar revolucionarios temibles. Esta contradicción alimenta la relación equívoca de fascinación-repulsión que mantiene la edición crítica con el mundo académico y los docentes-investigadores.
Paul Nizan
El editor busca en la universidad la robustez del método científico así como el prestigio de los autores. Pero deplora la perspectiva siempre diferente de los objetos de estudio. El interés le ordenan instalar a la cabeza de su colección de crítica social a un docente-investigador o, al menos, un candidato a caballo entre ciencia y política (entre productor y consumidor). En la misma lógica, el director de una revista crítica es proclive a equipar su comité de lectura con profesores asociados, tesistas y autores consagrados, a veces en detrimento de los intelectuales orgánicos del movimiento social, es decir, vinculados con formaciones de lo que ocurre en la calle, sindicales, políticas o asociativas.  Cuando los comités de redacción de revistas « comprometidas », encargados de seleccionar los textos contestatarios destinados al público en general, alinean a los mismos nombres que los consejos científicos de revistas académicas, ¿todos los planteamientos críticos tienen las mismas oportunidades de pasar por el tamiz? Con certeza, la formación doctoral ofrece a sus titulares conocimientos. Pero ella también implica una pedagogía de la renuncia, una educación del decoro y las prelaciones, una incitación a devolver los favores, un aliento a estimar los asuntos que son «siempre más complejos» , pues la híper-especialización se impone. Dicha formación autoriza la crítica pero evacua a la política así como difumina fácilmente la frontera entre lo serio y lo pomposo. Pierre Rimbert

martes, 3 de abril de 2012

SOBRE TEORÍA DEL COLAPSO:

"Terry Hunt pulveriza la tesis del ecocidio basándose en sus investigaciones sobre la Isla de Pascua. Demuestra que la población de la isla jamás supero las 3.000 personas, y pone las cosas en su sitio mostrando el impacto catastrófico de las razias esclavistas. En lo que respecta a la destrucción de los bosques de grandes palmeras que cubrían la isla, lo imputa a los roedores importados por los Polinesios: ratas cuya proliferación no fue contrarrestada por ningún predador. Los daños causados por estos animales en otras islas del Pacífico muestran que la explicación tiene su fundamento. Hunt acusa a Diamond de haberse inventado -SIN CONTRASTE GLOBAL- las cifras de población con el único objetivo de justificar la tesis del colapso: "Cifrar la población en 15.000 e incluso 30.000 habitantes no tienen ningún fundamento. Estas cifras se han utilizado para dramatizar el susodicho 'ecocidio' como producto de la sobrepoblación".  /5 Esta opinión resulta tanto más significativa cuanto que, en un principio, Hunt fue seducido por la explicación de Diamond referente a Rapa Nui (Isla de Pascua).
 /6 Michel Wilcox firma una contribución particularmente vigorosa sobre los "anasazis" de Nuevo Méjico y las regiones circundantes. Arqueólogo, Wilcox es descendiente directo de los amerindios que habitaban en el Sudoeste de los Estados Unidos. Nos quedaríamos cortos diciendo que las tesis de Colapso le interpelan directamente. Muy riguroso en el plano científico, el autor no disimula su indignación por la forma como Diamond acusa a los Indios Pima y Hohokam (su verdadero nombre) de la mala gestión medioambiental. Afirma que la misma debe ser imputada a los conquistadores y colonos (al principio españoles y luego estadounidenses). Para demostrarlo, Wilcox aporta la prueba de que el sistema agrícola de los indios, sofisticado y bien adaptado al clima, fue destruido en un decenio por los granjeros blancos instalados rio arriba, cuyas capturas abusivas de aguas secaron el rio Gila. Al carecer de ciudadanía americana, los indios no pudieron ejercer ningún recurso legal contra este hecho. Su civilización no se colapsó; simplemente tuvieron que huir de esas tierras. Un detalle que no se puede pasar por alto". 

lunes, 2 de abril de 2012

Antes de la GLOBALIZACIÓN había regímenes cerrados o "independientes" en donde el poder especulador del dinero no tenía nada que hacer; pero ahora no, ya ese poder se fortalece en una red de redes: