miércoles, 8 de febrero de 2012

LA NEUTRALIDAD

No estar interesadamente -o al margen de los principios éticos- de parte de una persona o grupo de personas es la NEUTRALIDAD, es decir, el no estar alineado -sin condiciones sensatas o afectivamente alineado- a alguna parte social. 
Pero, claro, si ya siempre es inevitable el estar de parte de algunas personas, se habrá de hacer atendiendo a unos valores éticos, eso es, como el estar de parte del que recibe una injusticia o es la parte más débil, la que está siendo oprimida. Es lo justo. 
Sí, partidos hay -de derechas- que están de parte tan solo de conceptos y nunca, en concreción, de personas que reciben injusticias: están de parte de... la libertad, del crecimiento económico, nunca de "unas" personas.
También, partidos de izquierdas están de parte de conceptos o de generalidades, como el ya estar de parte de los trabajadores; cuando, en la sociedad, todos ante un mínimo "trabajan" con mayores o menos facilidades -por ejemplo, un explotador "trabaja" explotando-. 
Aunque -en depravación- lo que más ocurre es que una mayoría sí es de verdad neutral éticamente, puesto que solo sirven de antemano A SUS INTERESES; no a personas, sino ante todo "a sus intereses". 
Conque, si se tiene ética -en realidad-, no se es neutral, en cuanto que ya tener ética es formar unos valores y unas prioridades aplicadas siempre a personas en concreto. 
Diferenciando que una cosa es "no ser partidista" y otra "ser neutral"; Gandhi no era partidista ni era neutral.

3 comentarios:

José Repiso Moyano dijo...

Hay verdad cuando triunfa la racionalidad (la verdad es un fruto de lo demostrado); pero, si no se respeta a la racionalidad conllevando eso irracionalidad -insensatez e injusticia-, NO SE PUEDE PEDIR RESPETO A ESA IRRESPETUOSIDAD irracional.
Sería una locura o una monstruosidad.

Nada es respetable NUNCA de lo irracional, lo haga quien lo haga.

9 de febrero de 2012 15:17
---------------------------

De antemano, nada debe respetarse por decreto o por mandato dominante o por mandato social; sino algo se respeta en función de su coherencia ética.

Así, se respeta más a la víctima que al asesino, al que demuestra que al que impone, al que se esfuerza que al que vive a costa de los demás, al que lucha por la justicia social que al que lucha por la justicia de unos pocos o de unos soberbios que piden obediencia a sus graves errores.

Es decir, el respeto no se da sin sensatez, sino conforme a lo que se gana cada cual en sus hechos éticos.

José Repiso Moyano dijo...

"EL FIN NO PUEDE JUSTIFICAR LOS MEDIOS" es una frase hecha, vacía o corrupta, si no se utiliza estrictamente en un contexto ético -o por hechos por delante si se trata de juzgar a alguien, no de suponer intenciones-.

Por ello, siempre hay que hablar de "MEDIOS ÉTICOS" para que el FIN o el RESULTADO o la CONSECUENCIA sea ética.

Pero, en muchos españoles, esos medios éticos brillan por su ausencia -o no existen-. Sí, los critican en el vecino o en los demás, pero ellos no se ven a sí mismos en la carencia total de ética.

Las 24 horas de todos los días ELLOS están justificando el fin con unos medios no éticos: no se puede justificar el fin de una costumbre maltratando a los animales, no se puede justificar el fin de cierta comodidad por medio de la impunidad, no se puede justificar el fin del recuperar la economía dando dinero público a los bancos que han creado lo crisis, no se puede, no se puede justificar el fin de saldar hipotecas especulativas con el desahucio y seguir pagándolas, no se puede justificar el fin de televisiones por medio de la vulgaridad, de la mentira y de la manipulación... y así hasta una lista interminable.

José Repiso Moyano dijo...

Amigo Pedro: Cuando se defienden ideales, ideologías, religiones, manifiestos, decretos, etc. tengo de una vez que decírselo a todos, se defienden argumentos por la verdad, no precisamente la verdad.
Así es porque, cuando se defiende la verdad de algo real en concreto, TIENES QUE PRESENTAR primero a ese algo, tienes que darle una presentación física, eso es, una "bienvenida", tienes en probación que presentarlo ya físicamente, delimitado como un objeto físico y, por base, delimitado igualmente siempre en un contexto físico.
Si hablas de un HECHO, sí se puede hacer (cualquier hecho, cualquier suceso, cualquier existencia presente, concreta y tangible). Pero, cuando se habla de algo general en idealidad y en emociones, es decir, multicompuesto de cosas físicas e ideas a la vez, en mezcla), la verdad NO EXISTE porque, sencillamente, todos sus resultados no son una verdad delimitada -y probativa- para que haya... una coherencia. Así pues, conseguir encontrar la verdad de la religión cristiana es algo imposible, puesto que sólo -en cuanto a eso- se hallan verdades en concreto de hechos provocados -entre otras cosas- por la religión cristiana; y, asimismo, sobre encontrar la verdad de una ideología o de un país.
¿Qué país es mejor Australia o Venezuela?, pues aquí no hay verdad, ¿lo comprendes? Porque Australia, por ejemplo, conlleva miles de contextos a la vez, sólo por eso. Ahora bien, si me hablas de un hecho que ocurre en Australia, ya cambia todo, todo sin confusión, pues ese hecho YA SE PUEDE DEMOSTRAR si existe o no, si es ético o no, si es legal o no, si es pacífico o no, si tienes graves consecuencias o no, si es ecológico o no, si es sano o no, etc.¿Cuál es mejor la ideología castrista o la ideología obamista?, pues a cada cual hay que juzgarla por sus hechos. ¿Cuál es mejor la ideología sandinista o la ideología lulista?, pues a cada cual hay que juzgarla por sus hechos que han mejorado sanidad, educación, etc. Ahora bien, sean los hechos que sean -pueden tener los hechos que les salga de los cataplines-, NUNCA, absolutamente nunca pueden ser hechos DE TORTURAS.

¡A ver si se comprende! Y, si existen esos hechos, CON LAS PRUEBAS SUFICIENTES, uno u otro, Roberto o Juan, Rogelia o San Pablo, HAN DE SER CONDENADOS, sin alguna impunidad -en una tabla rasa de DIGNIDAD-. Besos, abrazos y...¡tened un poco de piedad!
(Publicado en Facebook, junio 2011)